La bondad dio a Maíta dos coronas

El entrenador José (Maíta) Mercedes acaba de ganar su segunda corona del año en el baloncesto de primera competición del país, con el campeonato que llevó a conquistar al equipo Leones de Santo Domingo, en la Liga Nacional de Baloncesto (LNB).

Maíta ganó en junio pasado el torneo del Distrito Nacional, en el cual condujo al Club Bameso.

Fui testigo de cómo Maíta entrenaba en un mismo día, y durante los playoffs del torneo capitalino, los dos equipos.

Como gerente general del equipo del Bameso llegué a sentir preocupación por la distracción que eso suponía, aunque por respeto al gran profesional que es Maíta nunca se lo llegué a comentar.

Como en el torneo del Distrito Nacional con Bameso, ahora en la LNB, con Leones, la sapiencia del todavía joven entrenador, su gran calidad, fue decisiva para alcanzar la corona. La condición de bueno en su trabajo.

Esa condición es tal que, hoy por hoy, Maíta es uno de los mejores entrenadores con los cuales cuenta el país en el deporte de primera competición.

Fíjese que hablo en el aspecto macro, no sólo referido al baloncesto.

Su otra bondad

Esa condición de bueno, como entrenador, del antiguo armador de Los Mina es reconocida ampliamente en el país. Tres títulos de campeón en el Distrito Nacional, dos en torneos nacionales, la avalan.

Pero hay otra bondad de Maíta que quizá sea menos conocida y es la que le permite hoy disfrutar de esos dos títulos de campeón este año, en dos torneos tan distintos, pero igualmente difíciles, como son el del Distrito Nacional y el de la LNB.

Para explicarlo, lo primero que debo decir es que Maíta no estaba originalmente en los planes de ninguno de los dos equipos mencionados (Bameso y Leones) como coach titular.

En el caso del Bameso, originalmente, el coach del 2011 sería Antonio (Chicho) Sibilio y finalmente fue Modesto (Pechera) Guillén; a quien Maíta sustituyó, cuando el Bameso tenía récord de 2-2, en una Serie Regular de ocho juegos.

Voy a abreviar cómo llega Maíta al Bameso diciendo que desde el año pasado era el principal candidato para dirigir ese equipo en el 2011, pero limitaciones de tipo económico y del tiempo del coach para la ejecución de un proyecto de escuela de baloncesto lo impidieron en principio. Esas mismas limitaciones económicas impidieron que el coach fuera Sibilio.

Cuando en la mitad de la Serie Regular (4 juegos por jugar) este año, quien suscribe volvió a hablar con el laureado entrenador para el puesto en Bameso, esgrimiéndole entre otros argumentos la importancia que para el club y su aspiración de conseguir un bajo techo tenía que ganar el campeonato, la respuesta no se hizo esperar.

“Yo sé lo que cuesta conseguir un bajo techo. Pasé por eso en Los Mina. Cuenten conmigo”, fueron las palabras de Maíta entonces, las cuales espero guardar en mi recuerdo por siempre.

Lo próximo fue bajar considerablemente el precio por su trabajo y entregarse con un gran entusiasmo a la consecución de la meta doble: ganar el campeonato, para propiciar el bajo techo.

Maíta fue contratado luego por el Leones como asistente del extranjero Sam Vincent. El coach dominicano fue participado este año por el equipo Cocolos de San Pedro de Macorís, al cual dirigió en 2010, que no estaría con el club en 2011.

Después que ganó el torneo del Distrito Nacional, con Bameso, los bonos de Maíta se colocaron en un punto alto, a los ojos de quienes están en el “inside” del baloncesto dominicano. Fue una conducción brillante, magistral, la que hizo de un equipo, en el cual contó con muchas piezas de valía, lo cual complicaba su uso simultáneo.

Cuando se presentó la situación de la ausencia definitiva de Vincent, quien llegó a entrenar al Leones, y ante la demostración de Maíta al frente del Bameso, la directiva del equipo de la LNB, acertadamente, no titubeó en dejar las riendas de su equipo en manos del hombre a quien tenían contratado como asistente.

El gesto de bondad de Maíta de dirigir al Bameso, que todavía la adeuda dinero por su trabajo, le permitió ganar el torneo capitalino.

Y ese hecho le abrió las puertas para dirigir al Leones. Por eso, hoy día es doble campeón. Definitivamente, la bondad paga dividendos. Gracias, Maíta. Te mereces las dos coronas.

Bameso te pagará pronto el dinero que aún te adeuda. Lo más, importante, lo otro, nunca tendrá cómo pagártelo.

De media distancia: Este viernes tendrían una reunión los dueños de equipos de la NBA y los jugadores, en busca de una solución al paro laboral que afecta a la mejor liga del planeta, el cual ya hizo suspender los partidos de pre-temporada y amenaza con hacer lo mismo con la temporada completa... Después de las demostraciones de Eulis Báez este año, primero con la selección y ahora en la Final de la LNB, donde fue seleccionado como Jugador Más Valioso, ahora quizá algunos entiendan porqué el Bameso reclamó en el torneo capitalino el derecho de reserva que tenía sobre el jugador, más aún cuando el Club San Carlos, su competidor en la Final, tenía la intención de reclutarlo...

Sean las últimas líneas de la entrega de esta columna para expresar nuestro pesar por la muerte de Manuel (Cholo) Suero, con quien compartimos luchas en el baloncesto dominicano, las cuales forjaron una amistad, la cual confirmé después de su salida de Abadina, no se vio lastimada por nuestras críticas al dirigente deportivo.

Aún en el momento más ácido de nuestras diferencias, siempre manifesté públicamente y en privado mi opinión sobre la condición de buena persona de Cholo. Mis condolencias sinceras a sus muchos deudos. ¡Qué descanse en paz!

Por: Osvaldo Rodriguez Suncar // Para: Basket Puerto Plata